Secuestrando Bitcoin

Terminé de leer el libro Hijacking Bitcoin: The Hidden History of BTC (Secuestrando Bitcoin: la historia oculta de BTC) de Roger Ver y quedé pensando en las enormes diferencias que hay entre el BTC del White Paper y el BTC que tenemos a día de hoy. Son diferencias mayores al punto que, bajo un análisis estricto, pareciera que se trata de activos diferentes.


Bifurcación: ¿cuál es cuál?

Secuestrando BitcoinY tal vez sean activos diferentes. Tal vez eso que se quedó con el ticker BTC tras la bifurcación de la red en 2017 no sea lo que pensaba su creador entre 2008 y 2009.

¿Será posible que el Bitcoin del que hablaba Nakamoto sea el activo resultante de la bifurcación, es decir Bitcoin Cash (BCH), y no el activo que quedó en la red inicial, o sea Bitcoin (BTC)?

Entiendo que todos los proyectos sufren variaciones y ajustes en la medida que el tiempo pasa pero son variaciones que no cambian la naturaleza del proyecto. No es como que planeamos construir un edificio y terminamos construyendo un bote. Si lo que tenemos en nuestros planos es un edificio, al final del proceso constructivo tendremos un edificio, quizás uno con variaciones, sí, pero nunca un bote.

Si en este momento quiséramos usar el BTC que tenemos en nuestras wallets, ¿podríamos darle el uso descrito en el documento fundacional del proyecto? Me temo que muchas cosas se interponen entre el propósito inicial de BTC y la realidad. Veamos algo de eso.


El BTC del White Paper.

El título literal del documento es: Bitcoin: un sistema de dinero en efectivo electrónico peer-to-peer. Del título me pone a pensar la palabra dinero. ¿Es el bitcoin actual dinero visto desde la semántica del término? Sobre eso quisiera volver más adelante. Ahora quisiera darle una mirada al resumen del documento:


Una forma de dinero en efectivo electrónico puramente peer-to-peer debería permitir enviar pagos online directamente entre las partes y sin pasar a través de una institución financiera. Las firmas digitales son parte de la solución, pero los beneficios principales desaparecen si un tercero de confianza sigue siendo imprescindible para prevenir el doble gasto. Proponemos una solución para el problema del doble gasto usando una red peer-to-peer. La red sella las transacciones en el tiempo en una cadena continua de proof-of work basada en hash, estableciendo un registro que no se puede modificar sin rehacer la proof-of-work. La cadena más larga no solo sirve de prueba efectiva de la secuencia de eventos, sino que también demuestra que procede del conjunto de CPU más potente. Mientras la mayoría de la potencia CPU esté controlada por nodos que no cooperen para atacar la propia red, se generará la cadena más larga y se aventajará a los atacantes. La red en sí misma precisa de una estructura mínima. Los mensajes se transmiten en base a «mejor esfuerzo», y los nodos pueden abandonar la red y regresar a ella a voluntad, aceptando la cadena proof-of-work más larga como prueba de lo que ha sucedido durante su ausencia.


La anterior es la transcripción literal del resumen. He puesto en negrita las partes que creo merecen ser discutidas. Tan solo en ese pequeño párrafo Nakamoto nos hablaba dos veces de potencia CPU. Los primeros BTC que Nakamoto envió a Finney fueron minados con CPU y así fue durante un tiempo pero, ¿qué podemos hacer hoy con CPU? Con CPU solo podemos tener un nodo, cosa para lo cual no tenemos ningún incentivo salvo que queramos aportarle un granito de arena a la descentralización, algo que me parece estupendo.

Después nos dice que la red en sí misma precisa de una estructura mínima. No lo sé. Cualquiera que haya visto una granja de minería estará de acuerdo en que difiere mucho del concepto de estructura mínima. Y estas granjas son parte fundamental de la red porque es con su potencia GPU (no CPU) que se resuelven los problemas que agregan nuevos bloques y emiten las monedas. Los nodos mantienen la cadena de bloques en línea pero son esos equipos ASIC costosísimos quienes hacen las pruebas de trabajo.


Secuestrando Bitcoin
Estructura mínima…

En Secuestrando Bitcoin su autor hace mucho énfasis en la velocidad de las transacciones, la cantidad de transacciones simultáneas que podemos hacer en la red Bitcoin y, por supuesto, en algo de capital importancia: los costos para el usuario. Para empezar a analizar estos aspectos veamos qué nos dice el White Paper en la introducción:


El comercio en Internet ha llegado a depender casi exclusivamente de las instituciones financieras como terceros de confianza en el proceso de los pagos electrónicos. A pesar de que el sistema funciona suficientemente bien en la mayor parte de las transacciones, sufre la debilidad inherente al modelo basado en confianza. Las transacciones completamente irreversibles no son posibles debido a que las instituciones financieras no pueden evitar mediar en las disputas. El coste de esta mediación incrementa los costes de transacción, limitando su tamaño mínimo útil y eliminando la posibilidad de realizar pequeñas transacciones ocasionales, y hay un coste mayor al perderse la posibilidad de hacer transacciones irreversibles para servicios irreversibles.


Una de las cosas que Nakamoto pretendía con BTC era bajar los costos de las transacciones. Otra era que su invento sirviera para realizar pequeñas transacciones ocasionales. Son dos asuntos directamente relacionados: si los costos son bajos se pueden hacer pequeñas transacciones. Pero esto es opuesto a lo que ocurre con el actual Bitcoin. Cualquiera que lo tenga, sabe que las comisiones de red son altísimas.

Es cierto que con la red Lightning Network podemos hacer pequeños pagos, instantáneos y a un costo muy bajo. Sin embargo, no podemos perder de vista que los activos que circulan en la LN se encuentran por fuera de la cadena y algún día tendrán que volver a ella. Es decir, sí o sí algún día alguien tendrá que pagar el enorme costo de la comisión de red.

Secuestrando BitcoinLa velocidad de las transacciones tampoco es su fuerte. Las operaciones en la cadena principal son lentas y eso se debe, en buena parte, a que los secuestradores encargados de Bitcoin Core no han permitido aumentar el tamaño de los bloques.

A ver, esto no es para nada práctico. Nadie quiere esperar 10 minutos (o más) en el almacén hasta que su pago se confirme y muchas veces pagando una comisión mayor al precio del producto adquirido.

En ninguna parte de las 9 páginas del White Paper leí que el tamaño de los bloques estará fijado por siempre en 1 Mb. Entiendo que de esta forma cualquiera puede correr un nodo en el sotano de su abuela pero, ¿esa limitación no va en contra de la eficiencia con que podemos usar el activo? Si decimos que bitcoin es una moneda pero usarla es más lento y costoso que usar el sistema que teníamos antes de su aparición, ¿qué utilidad tiene en el mundo real?

En Secuestrando Bitcoin encontré un párrafo muy interesante sobre este asunto de correr nodos en casa:


Fundamentalmente, la idea de que los usuarios necesitan gestionar sus propios nodos completos para «gestionar su propio banco» es incorrecta. Bitcoin fue diseñado para que la gente normal no tenga que ejecutar sus propios nodos completos. Pueden utilizar un software más ligero. Recuerde, un nodo completo descarga una copia de toda la cadena de bloques y valida cada transacción en la red. Esto es innecesario para casi todo el mundo. Satoshi diseñó Bitcoin pensando en la Verificación Simplificada de Pagos (SPV), que permite a los usuarios verificar sus propias transacciones con una cantidad ínfima de datos. Usando SPV, no puedes verificar las transacciones de un extraño, ni puedes verificar cada transacción jamás realizada, pero la mayoría de la gente no tiene ninguna razón para hacerlo. Satoshi no fue tan tonto como para diseñar un sistema de dinero en el que cada usuario tuviera que descargar y verificar las transacciones de todo el mundo. No hay forma de que un sistema así pudiera escalar.


Escalar. Esa palabra es clave en cualquier análisis que hagamos de Bitcoin. ¿Cómo podemos pensar que tenemos un sistema global de pagos si la red procesa 7 transacciones por segundo? Visa asegura que puede manejar 24.000 TPS.

Y en esto todo está interconectado. Si es lento y costoso no habrá adopción masiva, es decir del público general. ¿Será ese el verdadero propósito por el cual no se permite aumentar la eficiencia? ¿Los devs de Bitcoin Core mantendrán esta limitación a propósito para inflar su precio y hacerlo accesible solo a los grandes inversionistas, las instituciones y los gobiernos? No sé si esa sea la razón pero eso es lo que está ocurriendo.

A través de varios BIP (Bitcoin Improvement Proposal o Propuesta para Mejorar Bitcoin) se ha intentado aumentar el tamaño de los bloques pero todas, indefectiblemente, han terminado en disputas, difamaciones, ataques y bifurcaciones. Sobre la relación entre tamaño de los bloques y adopción, el libro Secuestrando Bitcoin nos dice:


El parámetro técnico que acabó partiendo Bitcoin en dos fue el límite de tamaño de los bloques. Antes de que los bloques se llenaran, BTC disfrutaba de una cuota de mercado en la industria de las criptodivisas de alrededor del 95%. Una vez que los bloques empezaron a llenarse, la cuota de mercado cayó rápidamente. En el punto álgido del fallo de la red en enero de 2018, cayó al 32%, y muchos usuarios, empresas y desarrolladores abandonaron BTC directamente. En marzo de 2023, la cuota de mercado de BTC ronda el 40% y es probable que vuelva a caer con más fallos de red. Si los desarrolladores de Bitcoin Core simplemente hubieran aumentado el límite de tamaño de bloque a un nivel razonable, estoy seguro de que muchos proyectos de criptodivisas competidores simplemente no existirían, la industria se habría mantenido unificada en torno a una moneda, y BTC habría continuado siendo el principal sistema de efectivo digital para Internet. En su lugar, los desarrolladores de Bitcoin Core cambiaron a un sistema de liquidación con altas comisiones y transacciones poco fiables, dejando un vacío para el dinero digital que aún no se ha llenado.


Escalar, adopción y cuota de mercado. Conceptos claves a la hora de estudiar Bitcoin y discernir si lo que tenemos actualmente corresponde a su diseño original o no. En mi opinión personal, la adopción de bitcoin como medio de intercambio es mínima, ínfima si se quiere y eso, nos guste o no, le seguirá restando cuota de mercado. Al menos en cuanto a sistema de pagos se refiere.

Veamos otro párrafo del libro Secuestrando Bitcoin sobre la relación vinculante entre velocidad, tarifas y adopción.


Avancemos hasta hoy. A pesar de ser un nombre familiar, Bitcoin aún no ha conquistado el mundo. De hecho, hay una verdad sombría más allá de los titulares y los gráficos de precios: el uso real de Bitcoin ha disminuido desde 2018, y muchas empresas lo han abandonado por completo como opción de pago. En múltiples ocasiones, la red se ha doblado y se ha vuelto casi inutilizable con enormes tarifas de transacción y pagos poco fiables. En momentos de congestión de la red, la tarifa media puede alcanzar más de 50 dólares y las transacciones pueden tardar días o incluso semanas en procesarse. Y quizá lo peor de todo es que estos fallos han empujado al sector a adoptar los llamados «monederos custodiados», que no son más que cuentas de clientes gestionadas por una empresa, similares a una cuenta bancaria normal.


Sobre esto no tengo dudas. Yo mismo estuve un par de días esperando que unos sats que tenía en la LN (capa 2) llegaran a la cadena principal (capa 1). Pude haber agilizado el proceso si hubiera aumentado la comisión pero entonces todo se lo habrían quedado los mineros. Velocidad y costos es un gran dilema en Bitcoin.

La adopción de bitcoin como moneda de cambio es, apenas, un poco más que insignificante. Son pocos los establecimientos donde podemos pagar con bitcoin esos bienes de uso corriente como un par de zapatos, una cena o un libro. En su lugar, se ha convertido en una reserva de valor (y esto también es discutible debido a su volatilidad). No es que esté mal, no se trata de un juicio de valor, pero hay que reconocer que ese no fue su propósito inicial.


Entonces, ¿es dinero o no?

Bitcoin tiene algunas características del dinero pero es un tipo de dinero con poca usabilidad. Pienso en bitcoin como en la Libra Esterlina (es solo un ejemplo). La Libra es una moneda valiosa pero difícil de usar en la mayor parte del mundo. ¿Qué podemos hacer con Libras Esterlinas, por ejemplo, en un pueblo de Guatemala? Poco o nada. Primero tendríamos que cambiarlas por la moneda local. O al menos cambiarlas por dólares.

Con bitcoin ocurre algo similar. Es un bien de cambio; es divisible; se puede transportar con facilidad; es fungible, mis sats no valen más que los suyos y lo mismo ocurre con nuestros pesos, y es una unidad de cuenta pero, y aquí viene el pero, ni es ampliamente aceptado ni es fácilmente reconocible.

La mayoría de las personas preferirían recibir cachetadas como pago antes que recibir bitcoin. Esas mismas personas no pueden (ni quieren) adentrarse en esta tecnología. Mucho menos si los abrumamos con 24 palabras semilla, claves PGP, direcciones kilométricas, facturas y canales LN y un largo etcétera de barreras de entrada que existen en el mundo cripto. Barreras que inexorablemente habrá que derribar si se quiere que esto deje de ser cosa de nerds y cypherpunks.

Sobre la mutación de bitcoin de moneda a reserva de valor el libro Secuestrando Bitcoin nos dice:


El proyecto en el que me involucré en 2011 ha sido secuestrado y cambiado para peor. Bitcoin se diseñó como dinero digital, utilizable en el comercio diario, con comisiones mínimas y transacciones rápidas, y así funcionó durante años. Pero hoy en día, Bitcoin se considera «oro digital», no apto para el comercio cotidiano, con elevadas comisiones y transacciones lentas, una inversión completa del diseño original. Se habla de él como un «depósito de valor», sin prestar mucha atención a su utilidad como sistema de pago. Algunas personas incluso afirman que Bitcoin no puede funcionar como sistema de pago, porque no es escalable. Estas ideas comunes son simplemente falsas. La razón por la que Bitcoin ya no se utiliza como dinero digital no tiene nada que ver con la tecnología subyacente. Se debe a que un grupo de desarrolladores de software se hizo cargo del proyecto, decidió cambiar su diseño y limitó intencionadamente su funcionalidad, ya fuera por incompetencia, sabotaje o una mezcla de ambos. La toma de control se produjo aproximadamente entre 2014 y 2017 y, en última instancia, provocó la división de la red en dos y la fractura de la industria de las criptomonedas en mil pedazos. El diseño original todavía existe y sigue siendo muy prometedor, pero ya no cotiza con el símbolo «BTC».


Yo no tengo ni la experiencia ni los conocimientos suficientes en el tema para juzgar lo anterior como bueno o malo. En un párrafo anterior comparé a bitcoin con la Libra Esterlina pero es tan solo una forma de comparar su usabilidad en el mundo real. Personalmente pienso que bitcoin tiene algunas cualidades que lo hacen superior al dinero fíat.

Una de ellas es su carácter deflacionario: la imposibilidad de aumentar la masa monetaria circulante a capricho. Otra es esa fascinante mezcla de privacidad trazable: todo es auditable pero también es privado y, una tercera, es que, al menos hasta ahora, los políticos no pueden influir directamente en él. Sí, lo pueden regular, comentar sobre él desde su ignorancia y etcétera pero sus cochinas manos de parásitos todavía no pueden alcanzarlo.

No sé si me gustaría que BTC fuera una moneda para el día o día o lo prefiero como es actualmente, una reserva de valor (con sus bemoles). Creo que a largo plazo me conviene más lo segundo y por eso lo tengo, lo custodio e intento acumular un poco más cuando puedo. No obstante, soy consciente de que ese no fue su propósito inicial y que el BTC de ahora parece un pariente lejano del descrito en el White Paper.

Cada bitcoiner debería leer el libro y sacar sus propias conclusiones. Esas son las mías. Por cierto. Me contaron que en la zona de descargas hay un enlace al repo donde se encuentra ese libro. Hasta la próxima.

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J. Inversor

Escrito por:J. Inversor Otros posts del autor

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